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El cerebro es nuestra computadora portátil incorporada. Todos los procesos relacionados con las emociones y el conocimiento que vivimos ocurren principalmente allí en la cabeza. Pero alguna vez te has preguntado ¿qué pasa en el cerebro cuando aprendemos algo nuevo? Sí, esto es algo que vale la pena aprender para disfrutar a plenitud de las ventajas de tu cerebro.
Por eso te damos cinco excelentes razones para seguir aprendiendo nuevas habilidades, sin importar la edad que tengas:
1. La primera cosa qué pasa en el cerebro cuando aprendemos tiene que ver con la liberación de dopamina. Esta es un neurotrasmisor y a su vez hormona que regula la motivación y el deseo y hace que repitamos conductas que nos proporcionan beneficios o placer.
«También aprende a hablar en público con éxito»
2. Conocer algo nuevo te permite romper su rutina y eso permite también que el tiempo parezca pasar más lentamente. Mientras que la repetición nos pone en piloto automático, y cuando estamos prestando menos atención, las horas y los años parecen volar. Y de repente tienes 30, 40, 50 años y sientes un gran vacío de experiencias por llenar… bueno, no nos pongamos dramáticos, pero sí vale la pena que te pongas a aprender algo apenas termines de revisar las novedades de Bienestar y Salud en Makía.
3. Aprender algo nuevo hace que el cerebro construya conexiones entre neuronas, reemplazando algunas de las que perdemos con el tiempo. Recuérdalo siempre: eres el constructor de tu inteligencia.
«Ahora es tiempo de aprender a tomar decisiones en la vida en solo 6 pasos»
4. Ya sabes, es bueno aprender algo… de lo contrario, te podrías aburrir hasta morir. ¡No es un mito! Investigadores de la University College de Londres siguieron a unos 7.500 funcionarios durante más de 20 años y encontraron que aquellos que reportaron altos niveles de aburrimiento temprano tenían más del doble de probabilidades de morir de enfermedad cardíaca.
5. Cuando aprendes algo tu cerebro te permite frenar el miedo al fracaso. Por ejemplo, cuando cultivas una mentalidad de crecimiento ( «¡Me pondré mejor!») en contraposición a una mentalidad fija ( «¡No tengo esperanza!») fomentas la perseverancia y la resistencia. Esto lo reafirma Carol Dweck, PhD, profesora de la Universidad de Stanford de Psicología y autora del libro La mentalidad: La nueva psicología del éxito.
«¡Ya puedes aprender algo conectado a una computadora!»
