El famoso actor Tom Hanks parece llevar una vida bastante agradable excepto por una cosa. Padece de diabetes tipo 2 y él es muy claro en afirmar que fue su culpa por “haber sido un idiota y no haber controlado como es debido su dieta y su peso”.

Cabe señalar que existen dos variedades de diabetes: Diabetes de tipo 1 y Diabetes de tipo 2. Esta última es la más común entre las personas de una edad avanzada y en muchas ocasiones está asociada con los malos hábitos alimenticios, de allí lo que mencione Hanks. Es que los efectos de este tipo de diabetes no son muy desmotivantes, ya que pueden ocasionar ceguera, insuficiencia renal y pérdida de miembros inferiores incluso.

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Hay que agregar que la diabetes tipo 2 es motivo de que aumente el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular. Uno de los síntomas de este trastorno es la necesidad que siente la persona de orinar mucho, así como sentir sed constantemente y sentirse cansado.

Tom Hanks fue diagnosticado de diabetes tipo 2 en 2013 y tiene esperanzas en vencer a la enfermedad: “Mi médico dice que si puedo conseguir un determinado peso no tendré más diabetes tipo 2”.

“Soy parte de una generación de estadounidenses perezosa que ha seguido bailando ciegamente durante la fiesta y ahora está enfermo”.

– Tom Hanks a  Radio Times.

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“Yo era un tipo pesado. Has visto mis películas y sabes cómo estaba. Era un completo idiota”, dijo Hanks. Añadió que no es cuestión de simplemente dejar de comer un bollo de hamburguesa o esconderlo. Hay que tomarlo con seriedad. En su caso indica que ser padre a temprana edad le ayudó a mejorar sus hábitos. “Fui afortunado. Tenía a cargo a mis hijos desde una edad muy temprana, por eso no tuve el lujo de engordar demasiado. Nunca bebí demasiado”.