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De manera general se conoce que el consumo de multivitamínicos está cayendo, pero muchas personas los siguen tomando a diario. Su auge puede haberse terminado debido a que las investigaciones sugieren que son ineficaces en la prevención de enfermedades. Algunos de estos se han salvado de la caída y han entrado en un auge, por lo que debes conocer más sobre las vitaminas y sus funciones para poder tomarlos de forma sana.
Lo que debes saber de las vitaminas y sus funciones
Un estudio reciente encontró que más del 50% de los estadounidenses, y más de dos tercios de los ancianos, toman suplementos. Las pastillas de vitamina D y cápsulas de Omega-3 u otros aceites de pescado se dispararon entre 1999 y 2012. El consumo de vitamina D casi se cuadruplicó y el los aceites de pescado aumentó nueve veces.
Si eres uno de los millones de fanáticos de los suplementos, ten en cuenta lo siguiente:
1. Si estás tomando suplementos
Toma en cuenta que la Food and Drugs Administration (FDA) no evalúa estos productos por seguridad antes de que salgan a la venta. Busca marcas que hayan sido verificadas por un tercero competente como la US Pharmacopeial Convention (USP), NSF International, UL o ConsumerLab.com
2. Calcio
La cantidad diaria recomendada para la mayoría de los adultos es de 1.000 miligramos de suplementos y alimentos combinados. Un único envase de ocho onzas de yogur bajo en grasa proporciona el 42% por ciento de eso.
Tómalo: con vitamina D, sino tu cuerpo no será capaz de absorberlo adecuadamente.Trata de obtener también alrededor de 600 UI de vitamina D al día con tu pastilla de calcio.
NO: Tomes cantidades extremas de calcio. No, esto no hará que tus huesos sean «indestructibles» y sí podrá darte cálculos renales, estreñimiento y, de acuerdo con algunos análisis, incluso un mayor riesgo de enfermedad cardíaca.
« Lee también: El abecedario de las vitaminas »
3. Aceite de pescado o ácidos grasos Omega-3
Tómalo: con una comida. Esto ayudará a minimizar los efectos secundarios desagradables como los eructos y la acidez estomacal.
Nunca te los tomes con aspirinas u otros anticoagulantes (a menos que estos sean prescritos por un médico). Estos suplementos «adelgazan» aún más la sangre, aumentando el riesgo de sangrado.
4. Vitaminas A, D, E y K
Tómalo: como la excusa perfecta para disfrutar de algunas grasas saludables. Estos nutrientes pueden absorberse mejor con comidas que contienen grasa como los aguacates o el salmón.
NO: empieces a tomar vitamina K si estás tomando un anticoagulante. Esta vitamina puede contrarrestar efecto del medicamento y hacer que tu sangre sea más propensa a coagularse.
5. Hierro
Tómalo: con un vaso de jugo de naranja. Las investigaciones muestran que la vitamina C mejora la absorción de hierro en el cuerpo.
NO: lo tomes con productos lácteos o antiácidos. Ya que pueden contener calcio, lo que interfiere con la asimilación del hierro.
6. Potasio
Tómalo: con suficiente magnesio en tu dieta. El magnesio ayuda a regular el potasio en el cuerpo. Prueba tomarlo con nueces, legumbres y verduras de hojas verdes oscuras.
NO: lo tomes con algunos medicamentos para la presión arterial. Cuando se consume potasio junto con inhibidores de la ACE o de los receptores de angiotensina (como losartán, valsartán y otros que terminan en tan) pueden ponerte en riesgo tener una cantidad peligrosa de potasio en el torrente sanguíneo. Y eso podría producirte debilidad muscular, parálisis y arritmias.
7. Hierbas medicinales como el ginkgo, ginseng o hierba de San Juan
Tómalo: solamente en la cantidad recomendada por tu médico. Por que incluso las plantas pueden ser dañinas en grandes cantidades.
NO: las mezcles con otros medicamentos. Estos suplementos pueden interferir con algunos medicamentos recetados (como SSRIs, estatinas y warfarina).
8. Probióticos
Tómalo: con prebióticos. Estos son son carbohidratos que nuestros cuerpos no pueden digerir y que ayudan a alimentar a los probióticos, esos microorganismos beneficiosos. Las fuentes prebióticas incluyen espárragos, bananos y leguminosas.
NO: asumas que son todos iguales. Los más investigados son Lactobacillus, Bifidobacterium, y Saccharomyces boulardii. Consulta con tu médico sobre el tipo y la cantidad óptima para ti.
¿Quieres conocer más sobre las las vitaminas y sus funciones?
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