Imagina que tu pareja y tú están en una gran discusión. Ninguno de los dos quiere dar su brazo a torcer y hay muchos sentimientos de enojo y enfado. Te dice algo más y tú barajas entre tus posibles respuestas una. Estás con ganas de lanzar un contraataque explosivo, salir de la habitación y calmarte, tratar de razonar el asunto. También podrías crear una excusa, explicarle por qué se equivoca, cansarte y solo pedirle disculpas por «lo que sea» y esperar que ahí se acabe el asunto. Sin embargo, hay algo más que podrías hacer y que resulta crucial en estos momentos:  tranquilizarte, reducir la tensión y usar la validación emocional.

¿Para qué sirve la validación emocional?

La validación emocional implica transmitir que entiendes cómo se siente una persona y reconoces que tiene todo el derecho de sentirse de esa manera. Sí, decirle a alguien que está molesto o furioso contigo que tiene derecho a sentirse así puede parecer algo muy loco, pero el psicólogo Guy Winch dice que tiene su lógica. ¿Cuál? Cuando transmites ese «mensaje», y lo haces desde un lugar de empatía y simpatía, la magia sucede. Al menos psicológicamente hablando. Al mostrarle a tu pareja que de verdad entiendes su punto de vista y que aceptas y respetas lo que siente, en lugar de alimentar el fuego de su enojo, en realidad lo estás apagando.

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El por qué es necesaria la validación emocional

Todos anhelamos la validación emocional, tal vez mucho más de lo que creemos. Cuando estamos enojados, enojados, frustrados, decepcionados o heridos, lo que más queremos es que la otra persona lo entienda y nos lo transmita. Tener tus sentimientos validados con precisión y con empatía es poderosamente catártico, por lo que el receptor -de esta validación- puede experimentar un significativo e inmediato sentimiento de alivio visceral.

El problema radica en que tener estas experiencias son difíciles de conseguir. Esto se  debe a que no todos desarrollan esta habilidad, pero vale la pena practicarla. Si ambos miembros de la pareja usan la validación emocional sus desacuerdos serán más amables y mucho más productivos.

5 pasos para practicar la validación emocional

El psicólogo recomienda que realices los cinco pasos correctamente para lograr el impacto deseado.

1. Deja que tu pareja hable y complete su relato para que tenga todos los hechos, y para que sepa que eres consciente de sus sentimientos. De lo contrario, tu esfuerzo por validarlos no parecerá genuino.

2. Dile que entiendes lo que sucedió desde su perspectiva. Dilo estés o no de acuerdo con su visión de los hechos e incluso si su percepción es sesgada. Hacer esto no es una admisión de nada: puedes hacerle saber que tienes otro punto de vista.

3. Dile que entiendes cómo se sintió por lo que sucedió, desde su perspectiva. Trata de nombrar sentimientos específicos en este punto, en lugar de indicarle solo generalidades.

4. Dile que sus sentimientos son completamente razonables. Lo son dada su perspectiva.

5. Transmite empatía o simpatía por sus sentimientos de dolor o enojo. Una vez más, hacer esto no es una admisión de nada porque siempre puedes añadir tu perspectiva más tarde. ¿Cómo? Por ejemplo: Sé que te molestaste porque estuviste esperándome en el cine media hora sol@, pero en tu texto me dijiste que llegarías a las 20:00 y no a las 19:30.

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