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¿Cómo es posible que en un mundo de fanáticos de las comedias dramáticas millennials, no hayamos conocido de la existencia de Please Like Me? Al parecer la distancia del continente oceánico nos impidió apreciar a esta joya de las series de televisión juveniles, producción de las cadenas australianas ABC2 y Pivot, que Netflix puso a nuestra disposición desde febrero de 2017 y vale la pena aprovechar.
Escrita, dirigida, producida y protagonizada por Josh Thomas. Se estrenó un 28 de febrero de 2013, emitiéndose inicialmente en Australia y pudiendo ver la luz en Estados Unidos recién en 2016. En América ganó enorme aceptación del público y la crítica, alcanzando una nominación al Emmy.
Aquí les contamos todo lo que deben saber antes de empezar a ver Please Like Me:
7. Humor en medio de la tragedia
La serie relata la historia de Josh (Thomas), un joven de 21 años que asume su homosexualidad luego de que por estas mismas razones rompa con él su novia Claire (Caitlin Stasey). Decide así explorar al máximo su sexualidad y divertirse con el apoyo incondicional de su amigo y compañero de cuarto Tom (Thomas Ward), y en esos rumbos se ve repentinamente forzado a retornar al hogar donde creció, para hacerse cargo de su depresiva madre, quien ha intentado suicidarse.
6. ¿Las anécdotas de Josh Thomas o el Girls australiano?
Las comparaciones con Girls, de la que ya hablamos en otro artículo y producciones como Orange Is The New Black, Bones o The Goldbergs no se hicieron esperar, pues Please Like Me es otro reflejo frente al espejo, un proyecto personal inspirado en las vivencias de su creador.
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Josh Thomas es gay, así como el personaje que interpreta y en el show muestra cómo fueron sus primeros años viviendo su homosexualidad a plenitud. Aunque al inicio de la serie solo quiere pasarla bien, da la impresión de que su existencia se resume a resolver los conflictos emocionales de sus amigos y disfuncional familia entre alegrías, frustraciones y dedicación por la cocina y las manualidades. Comediante stand-up y escritor, Thomas es considerado como una de las mentes brillantes de la televisión australiana, el más joven en ganar el Festival Internacional del Humor de Melbourne con 17 años, así que no se sorprendan si lo ven en algún momento debutando en Hollywood.
5. La dupla Josh/Tom
La serie rinde homenaje a las amistades verdaderas, aquellas que en la vida real suelen ser siempre escasas. Tom (Thomas Ward) es el único aliado fiel del protagonista y aunque es heterosexual, no hacen falta palabras o elogios entre ambos para darnos cuenta cuánto se quieren e identifican el uno con el otro, compartiendo juntos triunfos y fracasos; además de ser selectivos a la hora de incorporar nuevos miembros a su gallada.
https://youtu.be/0UCjXsKETjQ
Esta simpática conexión entre los dos nace basada en vivencias reales de Josh Thomas y Thomas Ward (también co-guionista y productor de la serie), mejores amigos desde los 12 años de edad y posteriormente compañeros de cuarto por varios años.
4. Entrañables personajes secundarios
Pese a que identificar al protagonista de Please Like Me es tarea fácil, la serie ha aprovechado a plenitud la presencia de personajes secundarios, profundizando en sus historias y con Josh como sostén emocional de dos grupos: sus amigos y compañeros sentimentales, y su familia. El entorno que lo rodea es tan cautivante que a veces logra opacarlo a él mismo, sin darle tiempo suficiente para su vida propia.
https://youtu.be/aIRSl9vcdnc
Mientras la madre de Josh lucha por no terminar al borde de la locura, su padre Alan (David Roberts) se acerca a su hijo para compartir con él detalles de su relación junto a Mae (Renee Lim), una atolondrada tailandesa que es quizá el personaje más cómico de toda la serie. Aunque también atraviesan sus giros dramáticos, no podemos negar que Alan y Mae son ideales para un spin-off.
3. John
Ya comentamos en el punto 5 que la serie es un tributo a las amistades verdaderas, y ello no solo significa una conexión emocional y afectiva entre dos personas, sino también entre un divertido veinteañero y un perrito. Y es que así como en los filmes El Artista, Agua para elefantes y Beginners, el público se enterneció al ver a Uggie y Cosmo, Please Like Me cuenta entre sus personajes principales con John, un cavoodle que será otro de los acompañantes de Josh en sus aventuras.
No podemos negar que este canino entrenado, quien es en la vida real propiedad de Josh Thomas desde hace 10 años, protagoniza las escenas más enternecedoras de todo el show. Es también toda una marca registrada, ya que la compañía con la que Thomas produce la serie fue bautizada como “John & Josh International”.
2. Autenticidad y cotidianidad en su máxima expresión
Please Like Me no pretende ser una comedia gay, ni un relato forzado sobre una desesperada búsqueda del amor. Las relaciones sentimentales no parecen ser el motor de las vidas de los personajes, ya que el humor australiano es distinto y muchísimo más elegante que el de las sitcoms estadounidenses; los personajes no son playboys, sino losers.
Una pizca de humor negro también agregó cuidadosamente Thomas a su obra, pues la muerte, enfermedades mentales y conflictos como el aborto, el rechazo a homosexuales y las drogas son abordados con respeto y sinceridad. Las influencias de la cultura millennial son evidentes gracias una espectacular banda sonora moderna, con los personajes aventurándose a cantar a veces, y un intro diferente para cada episodio.
1. Inolvidable
El mayor elogio que podemos hacer a la producción es que no pretende en ningún momento maquillar la realidad. Por eso resulta complicado encasillar a la serie en un género, aunque más se acerque a la “dramedia”, con personajes que logran hacernos reír y llorar con intensidad similar, sin necesidad de ser explícitos o de utilizar bromas groseras. El atractivo de Please Like Me radica en su naturalidad y diálogos sencillos, empleando humor y conmoviéndonos, algo que muy pocos proyectos televisivos han podido realizar con éxito.
https://youtu.be/uHR3ZLOhegY
¿Te animas a ver Please Like Me?
¡Sus 4 temporadas están disponibles en Netflix!
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