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Una vez que escucharon la canción Me Rehúso de Danny Ocean, millones de personas quisieron volverla a oir una y otra vez. Esa es la magia del streaming, pues gracias a estas plataformas digitales en muy poco tiempo la canción alcanzó más de 260 millones de reproducciones. Gracias a la tecnología y el talento que supo inspirar este chico venezolano de 22 años, residente en Miami, que logró convertirse en una tendencia. No es sencillo lograrlo, pero es posible. En el caso de Danny tuvo mucho que ver también que al ver que la canción estaba sonando, el equipo de curadores de las listas de reproducción de Spotify, empezó a programarla en listas de reproducción locales, donde empezó a viralizarse.
Solo bastó un mes para que el artista empiece a ser reconocido en todo el mundo, tanto así que ya firmó una alianza entre Atlantic y Warner Music Group el mes pasado. Su imagen es la de un chico normal de estos tiempos, que usa las redes sociales y que se muestra sensible ante lo que pasa en el mundo. Siempre se lo ve haciendo algo musical. En la mayoría de las foto su rostro está tapado por su cabello largo y la gorra de beisbol.
La historia de la canción es singular, pues tiene que ver con la situación social de su país, donde tomó la decisión de buscar más oportunidades en otro lugar. «Amo mi país. Venezuela es un lugar increíble, pero es difícil y no es saludable en este momento, especialmente si eres una persona joven».
Entonces, lejos de su hogar, empezó a trabajar en una pizzería de Miami en el 2015, ciudad a la que se mudó con familiares. Pero su novia se había quedado en Caracas, entonces cuando se acercó el día de San Valentín pensó en lo quebrado que andaba de dinero en ese momento, así que se dijo: ‘Bueno, voy a enviarle una canción’. Así, en su dormitorio escribió Me Rehúso, con una letra que logra identificarse con muchísimos hispanos de distintos países y situaciones.
Danny siempre vivió con la música, su madre era artista y su papá, aunque de profesión diplomático, perteneció a algunas bandas de rock. Danny además estudió diseño gráfico y ya desde el colegio componía canciones de hip hop.
En Miami está viviendo el auge de su éxito. Incluso ya lanzó la versión de Me Rehúso en inglés, con el título «Baby I Won’t». Y luego de haber firmado con Warner-Atlantic se centra en hacer un álbum en ese idioma, donde espera captar todas esas diversas sensaciones musicales que le llevan a crear una canción que dejen algo en el recuerdo de sus fans.
Fuente: Billboard