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Del 31 de agosto al 3 de septiembre se llevó a cabo el IX Congreso Ecuatoriano de Sexología y Educación Sexual, en la Universidad Estatal Península de Santa Elena (UPSE). Este evento juntó múltiples especialistas de la salud sexual, tanto en áreas médica, psicológica, psiquiátrica, enfermería y en aquellas áreas se hizo énfasis a los temas que atañen a las mujeres, como respuesta a las exigencias sociales del Ecuador, Latinoamérica y el mundo por una sexualidad con autoestima, responsabilidad y conciencia. Aquí les traemos algunos de los temas que hablan los sexólogos en un congreso.
1. Vaginas Sospechosas: un reencuentro con el erotismo femenino
Nereyda Lacera Reales, médica sexóloga, se pregunta ¿Por qué sospechar de las vaginas? ¿Por qué cargarle más culpas y misterios a los genitales femeninos?
Para tranquilidad de los lectores, sospechar de las vaginas no es atentar contra las mujeres. ¡De ningún manera! La sospecha que recae sobre el órgano genital femenino es la acción que propiciamos desde la sexología para romper con las cadenas que han reprimido a las mujeres, durante siglos, señala Lacera.
Los mitos y tabúes sexuales hacen creer a las mujeres que su sexualidad es vergonzante, culposa e indeseable.
Les hacen sentir que no merecen el placer o que éste depende de los hombres quienes, lastimosamente, también fueron educados con conceptos errados y distorsionados acerca de la sexualidad femenina, añade.
La conclusión aquí es que si las mujeres se liberan de miedos y mentiras, podrán reconocerse como personas sexuadas y sexuales que tienen derecho al placer, sin inhibiciones o culpas.
Invito a todas las mujeres: educarse sexualmente para lograr vivir una sexualidad plena en su totalidad.
–Nereyda Lacera Reales, sexóloga.
2. Adicción al Cybersexo
La Dra. Nuria Vanegas nos habla del mundo tecnológico y la gran conexión al cyberespacio:
Los seres humanos estamos siendo víctimas de una adicción creciente al internet, si esto se une a la pre-existente adicción a la pornografía, tan severa como la adicción a la heroína.
¿Ustedes creen que estamos frente a un monstruo silente?
La adicción al cybersexo, según la doctora Nuria, se manifiesta con una búsqueda sin control y excesiva de actividad sexual que carece de contacto físico. La excitación sexual se dará a través de mensajes de texto o video, de contenido erótico-sexual, visita de páginas pornográficas, etcétera; todo esto para la creación de fantasías que necesitan ser satisfechas.
3. El preservativo, sus usos y la eroticidad
¡Tema del día a día! Controversial, ignorado, aclamado y muy solicitado a la vez. El Psic. Rodolfo Rodríguez Martínez se pregunta que tanto sabemos del mismo, pese a que este método anticonceptivo de barrera lo podemos encontrar en cualquier farmacia, gasolinera o supermercado. Sin embargo, cómo escoger el más adecuado, sus correctos usos y sobre todo, cómo hacerlo más efectivo y que permita el goce de ambos (pareja) en el encuentro íntimo. El tabú y prejuicios tanto en hombres como mujeres lleva a que este tema sea expuesto en eventos como este congreso organizado por la SESEX (Sociedad Ecuatoriana de Sexología y Educación Sexual), de la cual Rodríguez fue elegido presidente recientemente.
Rodolfo Rodríguez considera que no sólo la poca cultura para usar preservativos sino que múltiples problemáticas sociales tales como: embarazos no deseados, abortos, violaciones, ETS (enfermedades de transmisión sexual), VIH/SIDA, acoso o abuso sexual, entre otros responden a la carencia de conocimiento.
Nuestra labor desde SESEX se concentra en las soluciones efectivas y concretas de nuestra población en riesgo y de las nuevas generaciones.
–Rodolfo Rodríguez, psicólogo especializado en sexualidad.
4. La conquista no es en esencia una estrategia orientada hacia las otras personas
Para Ezequiel López, Psicólogo y Sexólogo Clínico, la conquista es en primera instancia un proceso de desarrollo propio.
Lo más interesante es que con unas capacidades básicas, una buena guía y el deseo de cambiar, el desarrollo de esas habilidades está a tu alcance.
El capital erótico, uno de los activos más importantes en la vida actual, no solo es importante en la intimidad de la pareja, sino en todas las relaciones sociales, incluyendo el trabajo; especialmente en aquellas ocupaciones que implican un contacto cotidiano con otras personas. Las habilidades para seducir representan un plus que nos diferencia de los demás: el cuidado de la imagen, el atractivo personal, el buen trato, la capacidad de liderazgo, la vitalidad social, el sentido del humor.
Diferentes estudios actuales han demostrado, sin lugar a equívocos, que los hombres y mujeres considerados como atractivos en una determinada cultura convencen más, tienen mejores puestos de trabajo, más éxito en sus profesiones y tienen más ingresos económicos, resalta López. Sin quedarnos solamente en el aspecto económico como parámetro de la felicidad, tienen más éxito social y un camino allanado para cumplir con sus sueños.
5. La psicoterapia y erotismo en la pareja postmoderna
En un mundo en donde la globalización y los cambios resultantes de ello son cada día más rápidos, el psicólogo Juan Miguel Valdez, de México, no niega los beneficios que la post modernidad tiene. Aunque los perjuicios parecieran ser más, advierte.
Así, Valdez señala la explotación comercial del erotismo, la necesidad de erotización de la imagen corporal en mujeres y hombres, también la mayor incertidumbre y ansiedad relacional generada por la libertad erótico-afectiva. Otra problema común en la posmodernidad es la dificultad para enamorarse y mantenerse más en la relacion de pareja, también la percepción constante de falta de futuro en las mismas. Mientras que a nivel general hay una educación anestesiada de la sexualidad y se reflejan nuevas ansiedades emergentes de la sexualidad/corporiedad, en donde pareciera que el orgasmo es el fin último de la relación y no el encuentro con el otro.
Por ello Valdez apunta a un trabajo psicoterapéutico con las parejas, a promover la toma de conciencia sobre la corresponsabilidad relacional, recuperar la expontaneidad relacional y reparar las fracturas entre el deseo y el contacto con el otro.