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Te debe haber pasado que un amigo te dijo que te vio en la calle y… no eras tú. Sí, tenemos un doble que no imaginábamos. ¡Qué miedo! Pero suele ser más común de lo que crees, se trata de tener un doppelganger o un ‘gemelo’ falso.
Quizá tengas que preguntarle a tu padre si alguna vez tuvo un hijo que no conoces, pero a veces simplemente pasa que las personas se parecen unas a otras. Es lo que le ocurrió a un hombre durante un vuelo, y su amiga Lee Beatie lo documentó con un selfie:
Guy on right is the husband of my friend @elrottencrotch. Guy on left is a STRANGER he met on a flight last night! pic.twitter.com/kwBFOOEoMc
— Lee Beattie (@leebeattie) octubre 30, 2015
“El tipo de la derecha es el esposo de mi amiga. El tipo de la izquierda es un extraño que él encontró en el vuelo de anoche”. Y al parecer han encontrado más:
I count five! @the_real_pumps @ndmckeown @Artminx @leebeattie @elrottencrotch @ben_cameron pic.twitter.com/iIIPmYXNXJ — Niclas Jornée (@NJornee) octubre 30, 2015
Tan extrañamente común es esta situación, que este año tres jóvenes ingleses se propusieron encontrar a sus gemelos en el plazo de un mes. Habilitaron una página web llamada Twins Strangers donde puedes colocar tu foto y buscar tu gemelo en el mundo. Y los encontraron.
El periódico inglés The Telegraph contactó a Daniel Podini, científico forense y experto en reconocimiento facial de la Universidad George Washington, quien señaló que nuestros genes se combinan al azar, por eso es probable que algunos de nosotros parezcamos similares. Por otro lado, existe el sesgo de la percepción que cada persona filtra según sus propias experiencias.
Además que al ver un rostro, si solemos seguir el siguiente orden: ojos, boca, nariz, donde el tamaño y ubicación de los ojos influyen en la forma en que vemos el resto de la cara. Es decir, con unos ojos similares ya tenemos la mitad del camino para parecerse mucho a alguien. Pero si en cambio vemos primero la nariz, boca y al final los ojos, nuestra guía para encontrar parecido un rostro a otro será la nariz.
¿En serio todos tenemos un doble… un doppelgänger?
De seguro hemos escuchado muchos casos de dobles, yo sé que tengo al menos uno en mi ciudad. Una vez hicieron parar un taxi, pensando que era yo caminando por una calle. Lo llamaron tanto a esta persona por mi nombre, que aquel hombre se acercó extrañado y no… no era yo. Luego incluso pensaron que yo estaba haciendo una broma, haciéndome el desentendido. No es la primera vez que me pasa.