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Los libros extraños para leer con devoción son aquellos que nos presentan historias nuevas con narradores inusuales. Las novelas como Nutshell de Ian McEwan donde los sucesos te los cuenta un feto. ¿Muy loco, verdad? No podemos resistir preguntarnos que pasaría contigo si te contáramos que hay otros bebés no nacidos que hablan en la literatura y muchísimos personajes poco comunes que te cuentan historias.
Narradores sorprendentes en libros extraños para leer
¡Nos mata la curiosidad! Así que aquí te van algunos de los libros que Lucy Scholes considera tienen los narradores más inesperados y los puntos de vista inusuales.
1. Like mother de Jenny Diski (1988)
La escritora Jenny Diski creo en 1998 un personaje tan raro como el de Ian McEwan. Like mother es una historia narrada con “palabras imaginadas” a un “oyente imaginario”. ¿Por qué? Su novela está narrada por un bebé nacido sin cerebro (anencefálico) llamado Nony. Él narra la vida de su madre Frances:
“Quiero pasar el tiempo. No tengo más que la historia de mi madre para contar…Tengo un regalo para compensar mi cráneo vacío”.
2. El asesinato de Roger Ackroyd de Agatha Christie (1926)
Los narradores no fiables, esos cuya credibilidad está seriamente comprometida, puede ser una constante en algunas de las mejores obras literarias. Sin embargo, esta figura fue considerada innovadora cuando la novela policíaca de Agatha Christie fue publicada por primera vez.
3. La colina de Watership de Richard Adams (1972)
La colina de Watership está narrado en tercera persona, pero desborda originalidad por su punto de vista. ¿De qué hablamos? Richard Adems cuenta la épica historia de una sociedad de conejos que va en busca de un hogar seguro. Este tipo de narradores se ha vuelto muy popular en los últimos años Si quieres leer un libro similar, pero más reciente busca Las abejas te Laline Paull de 2014.
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4. Los parásitos de Daphne du Maurier (1949)
Fue una obra transgresora para su época. Narrada desde la primera persona del plural – “nosotros” – cuenta la historia de los hermanastros Niall y Maria Delaney y su media hermana Celia. Los tres son referidos como una sola entidad, en un guiño hacia una cercanía inapropiada entre ellos. Este recurso también fue usado por Jeffrey Eugenides en Las vírgenes suicidas (1993).
5. Me llamo Rojo de Orhan Pamuk (1998)
Un grupo de ilustradores en la Turquía del siglo XVI hablan cada uno en un capítulo sin revelar su identidad. Uno de ellos ha matado ha cometido un asesinato. Unos 12 puntos de vista diferentes, narrados en primera persona, se usan para construir esta historia de múltiples verdades. Los narradores de la figura detective hasta lo más extraño: la víctima que nos habla desde el más allá, una cabeza cortada, la misma muerte, Satán, un perro, un caballo, un árbol, una moneda de oro, y el color carmesí.
6. El coleccionista de coleccionistas de Tibor Fisher
El potencial narrativo de un objeto inanimado, no se ve desestimado por esta novela que es por narrada por un cuenco de cerámica mesopotámica de 6.000 años de edad. Este cuenco resulta particularmente locuaz y tiene un gusto por los juegos de palabras.
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7. Desde mi cielo de Alice Sebold (2002)
Las narraciones hechas por niños y adolescentes son las más populares de los últimos tiempos. Pero una de las más singulares narradoras es Susie Salmon de 14 años. La protagonista de Desde mi cielo narra la novela desde su visión personal de la vida que hay después de su brutal violación y asesinato. Ella mira a su familia, a su asesino y todo su vecindario desde esa otra realidad.
8. Las cosmicómicas de Italo Calvino (1965)
Dentro de los libros extraños para leer debía aparecer esta colección de cuentos de Italo Calvino. Las Cosmicómicas presenta al más inusual narrador: “viejo Qfwfq”. Él resulta ser más antiguo que el universo mismo y suele cambiar de forma en cada historia: uno de los primeros animales en salir del agua primordial; un dinosaurio; un niño cuyos juguetes son átomos de hidrógeno; y hasta el mismo átomo.
9. La ladrona de libros de Markus Zusak (2005)
La historia transcurre sobre la Segunda Guerra Mundial en Alemania. La pequeña Liesel Meminger, de 10 años, se convierte en testigo de los horrores del régimen nazi.¿Qué diferencia este relato de otras ficciones del Holocausto? La novela es narrada por la Muerte. Aquí ella no es una imponente Parca sino una especie de conserje con exceso de trabajo. Cínica y compasiva en igual oscuramente bromea cuando se trata de su carga de trabajo: “Maldita sea. Necesito una escoba o un trapeador”.
¿Conoces más libros extraños para leer?
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Fuente: BBC