Si hasta antes de los seis o siete años no inculcaste a tu hijo a tener un espacio de tiempo para sus deberes y lo dejaste jugar toda la tarde…No te preocupes, la mayoría de los padres hacen lo mismo. El momento ideal para empezar a crear una rutina de estudio con tu hijo es cuando incia la primaria. Así, puedes buscar que su rutina se integre en la dinámica familiar sin inconvenientes:

Lo primero es establecer un orden como, por ejemplo, al llegar de la escuela tu hijo se bañará, almorzará, hará sus deberes, después jugará y luego cenará y se irá a la cama. En una rutina hay que mantener el orden y cumplirla la mayoría del tiempo, recuerda que simpre puede haber imprevistos.

Crear hábitos de estudio es fundamental para los niños, por ello los padres deben crear un ambiente propicio para que los niños puedan realizar sus tareas escolares:

• Se debe tener un lugar fijo para esta actividad que sea luminoso, limpio y ordenado.
• El niño debe esta sentado en una silla, frente a su mesa y tener todos su materiales de trabajo al alcance.
• Las distracciones como la TV, las consolas, juguetes y demás, preferiblemente, no deben estar cercanas al área de estudio o en el área de estudio.

Al crear tu rutina de estudio ten en cuenta que es aconsejable que el niño realice su tarea escolar y tenga un periodo de estudio de 15 minutos y que este se alargue paulatinamente, dependiendo de la complejidad de los deberes, hasta 45 minutos como máximo.

No olvides que tu papel es el ser un ayudante, facilitar ciertas cosas, como el lugar donde se realiza la atividad y que el niño tenga los materiales para hacer sus deberes, mas no hacer la tarea de tus hijos. A parte de ello también deberías:

• Hacer que tu pequeño sea consciente de la importancia de su tarea escolar.
• Mostrar interés por la tarea escolar del niño y más si eres de los padres que trabaja hasta tarde. Un “¿Qué deber te enviaron hoy?” y un “¿Cuándo llegue a casa me lo enseñas?” motivará a tu hijo a hacer sus tareas escolares. Y sí, sonríe cuando el niño te muestre ese dibujo familiar donde pareces un globo con piernas.
• Valora el trabajo que realiza en su tarea escolar, recuerda que él la hizo solo y está orgulloso de ella. Ofrece, con mucho tacto, algún cambio si es necesario.
• Fomenta en él la lectura como actividad lúdica y lee con él en tus tiempos libres… ¿No tienes un libro favorito? Usa los cómics que te gustan o ve a la librería y deja que él mismo escoja algo.

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• Crea  espacios donde puedas conversar con tus hijos, no importa de qué hablen, esta actividad  estimulará su uso del lenguaje y reforzará sus lazos afectivos.
• Ayúdalo a planificar su tarea escolar. Si el proyecto de llevar una maqueta del zoo a clase es para la otra semana, no lo dejen todo para el último día.
• Revisa la agenda del niño cuando llega a casa. La agenda es tu vía de comunicación con los profesores.

Ya que sabes los principios de lo que debes hacer para enfrentar a la escuela primaria te será más fácil el cambio. Ahora padres respiren hondo y digan:

¡No le temo a la tarea escolar de mi hijo!