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Hay alimentos como las papas fritas que simplemente no puedes parar de comer. Y aunque no lo creas, no es por su sabor salado sino por su alto contenido de grasas. Las grasas hacen que nuestro intestino produzca una sustancia llamada endocanabinoides -similar a los compuestos que contiene la marihuana- que provoca una conducta glotona.
Los científicos no saben por qué este mecanismo se desata únicamente con las grasas, pero creen que se debe a que los animales tienen una necesidad imperiosa de consumir grasas. Estas son escasas en la naturaleza, pero cruciales para el adecuado funcionamiento de las células.
Y como podemos hacerle trampa a la vida, te contamos cuáles son los snacks más adictivos y sabrosos que puedes comer sin parar. Tienen niveles bajos de grasa y no llegan a ser perjudiciales para tu salud. ¡Los alimentos para una vida sana pueden ser exquisitos!
Alimentos para una vida sana y sabrosa
1. Maní, otras semillas y frutos secos
El maní, las nueces y las almendras tienden a enviar señales a tu cerebro de que hay una tarea inconclusa cuando los comes. Por eso no puedes parar hasta que la bolsita está vacía, pero tienden a calmar el hambre hasta por 30 minutos. Más allá de los engaños que crean en ti, estos snacks saludables son ideales para las personas que pasan mucho tiempo ocupados en la oficina, ya que puedes conseguirlos fácilmente. En el mercado existe una gran variedad, pero elige siempre las opciones más naturales posibles.
2. Tostaditas integrales
No tienen un efecto adictivo, pero al ser de esos alimentos que calman el hambre de manera rápida se vuelven indispensables. Lo mejor es que no tienes que comer una gran cantidad de ellos. Unas tres tostaditas son suficientes y si no puedes conseguirlas siempre podrás consumir pan o galletas integrales que tienen el mismo efecto.
3. Fruta fresca
Las personas que aman los dulces y el azúcar encuentran un gran aliado en las frutas cuando deciden comer más alimentos para una vida sana. La fruta entera no necesita que se le añada ningún aditivo y ya viene en las cantidades perfectas. ¿Amabas los dulces? Unas 10 uvas son lo ideal para tu comida de media mañana, una manzana, un mango o un plátano. ¿Prefieres los sabores agridulces? Unas 10 cerezas o 5 fresas pueden hacer el truco. También puedes llevar trozos de tus frutas preferidas como la sandía, piña, melón, entre otras. ¡Variedad es lo que más hay!
4. Verduras, leguminosas y hortalizas
Si eres de los que amaba las papas fritas, puedes intentar cortar tus vegetales en trozos largos para que emulen a tu ex snack preferido. Unas zanahorias, apios, espárragos o pepino pueden ayudarte a pasar el hambre de media tarde.
5. Yogur
Opta por los yogures bajos en grasa y disfrútalos en el desayuno o como snacks durante el día. Un medio vaso o una presentación personal (200ml) te mantendrán contento. ¿Quieres darle más potencia a tu yogur? Ponle unos cuántos trozos de fruta y frutos secos.