Se habla del instinto animal en los humanos, sin embargo está en otras especies donde podemos verlo más a flote. Existen madres animales que protegen y hasta ponen en riesgo su propia vida para cuidar a sus crías.

De ellas podemos aprender grandes enseñanzas, pero antes debemos conocerlas.

Cuáles son las mejores madres animales de la naturaleza

La naturaleza está llena de sorpresas y lo que más llega son justo esas similitudes que logramos tener con ella. Es por esto que podemos relacionarnos con las siguientes madres animales en cuanto al cuidado de nuestro hijos se refiere.

Pulpo

Una hembra pulpo puede poner entre 50 y 200 mil huevos. Ella los cuidará hasta que se abren con la determinación más fuerte. Nunca abandona el nido, ni para alimentarse, por lo que es capaz de comerse uno de sus tentáculos. Al final del proceso llega a estar tan débil que usualmente muere.

Oso polar

Las mamá oso suelen dar a luz en inverno, por lo que quedarse en la madriguera es súper importante para mantener calentitos a sus bebés. Ella no abandorá el lugar y les dará de amamantar, por lo que usará su propia reserva de energía para sobrevivir.

Elefante

El embarazo de los elefantes es el más largo de todos los mamíferos, dura 22 meses. Usualmente dan a luz a una sola cría que puede llegar a pesar unos 100 kilos. En los primeros meses el bebé elefante solo se alimentará de leche materna, pero aun cuando aprenda a usar su trompa para beber y llevar hojas a su boca, seguirá mamando hasta que cumpla tres o cinco años.

El aligátor americano

Esta especie también es conocida como caimán del Mississippi. A pesar de ser un reptil depredador, su instinto materno hace que las hembras cuiden los niños de sus huevos constantemente. Cuando eclosionan, ella llevará en su boca a las crías hacia el agua, donde seguirá cuidándolos por tres o cuatro años.

Las aligátor americano desafían lo que otras especies parecidas harían, pues un caimán tranquilamente podría comerse los huevos.

Gacela

Podría parecerte antimaternal que una gacela madre deje sola a su cría en plena sabana africana, pero esta es un estrategia para alejar a los depredadores, poniendo su propia vida en peligro. Además, ellas tomarán cortas siestas, que sumadas no harán más de una hora al día, para estar siempre vigilantes de cualquier peligro.

Gorila

La etapa de lactancia de un bebé gorila puede durar de cuatro a cinco meses, además que lo hará cada hora aproximadamente. Por esto, en ese primer tiempo de sus vida estará siempre con mamá. No obstante, incluso cuando sus crías lleguen a tener un año, las madres gorilas no dejarán que sus pequeños se alejen más de cinco metros de ella.

Así, una cría gorila estará al lado de su madre hasta que cumpla tres o cuatro años, e incluso podría compartir el nido hasta los seis.

Foca de Groenlandia

Para sobrevivir tan bajas temperaturas, las crías deben generar rápidamente una capa de grasa. Por ello, las focas de Groenlancia mamás producen leche con un porcentaje de 60% de grasa. La madre amamantará a su cría durante 12 días sin alimentarse y llegará a perder hasta 3 kilos de peso por día.

Tijeretas

Los insectos no son los animales más maternales del reino animal; sin embargo las tijeretas cuidan con mucho amor a sus huevos. Les dan calor, los protegen de predadores y hasta los limpia de los hongos. Pero ahí no termina, estos insectos alimentan a sus crías, con partes de su cuerpo si es necesario, hasta la segunda mudanza.

Oragután

Los primeros cuatro meses de vida, un orangután los pasa con su madre. Seguirá siendo dependiente de ella y de la leche materna hasta los cinco años, pero será después de los seis o siete años que se alejará de su madre.

¿Con cuál de estas madres animales te sentiste indentificadx?

FUENTE: BBC.