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Si te gusta viajar con frecuencia, sabes bien que ajustar el presupuesto para lograr toda la diversión posible es uno de los mayores retos. Si eres de la generación que vive conectada posiblemente ya ha llegado a tus oidos Airbnb, que es una de las formas más populares para hacer couchsurfing.
Si no lo conoces te lo explicamos rápidamente, hace unos años Joe Gebbia hospedó a un desconocido en un colchón de aire en la sala de su casa. Y a partir de una convención en su ciudad, donde los hoteles ya estaban copados, pensó que sería bueno crear una página de reservas de alojamientos entre particulares. Es decir un portal donde uno pueda buscar quedarse en casas de personas de la ciudad donde uno viajará y que sean confiables.
Contra todos los pronósticos -aquellos que nos hacen creer que el mundo es un lugar muy peligroso para hospedar a extraños en casa- la idea ha funcionado y hay millones de personas siendo anfitriones o sino huéspedes bajo el sistema de reserva de Airnbnb.
Airbnb, Pros y Contras
Se ha ido viralizando lentamente, en base a blogs, reviews o comentarios, como un modo de conseguir hospedaje y experiencias de viaje a buenos precios. Veamos algunos pros y contras de usar Airbnb.
PROS
1. Más económico que un hotel: Es posible hallar grandes ofertas en buenos hoteles, pero en Airbnb es una constante encontrar precios muy convenientes. Además hay mejores posibilidades de alquilar cuartos o casas para grupos y encontrar hospedajes de acuerdo a nuestros gustos más específicos. Y los hay para todos gustos, puede ser un sofá hasta un yate de lujo.
2. Acercamiento más genuino con la ciudad: En un hotel en cierta forma eres un huésped más. En los hogares anfitriones eres EL huésped. Por lo general los anfitriones tratarán de guiarte y ayudarte a que la pases bien. Al ubicarse las casas en barrios y ciudadelas, sentirás el sabor local mucho más latente, podrás integrarte a la comunidad, tener experiencias únicas. Un hotel por lo general te ofrece planes más neutrales y típicos. Con Airbnb es más sencillo personalizar tu viaje de acuerdo a tus expectativas y según donde quieres ubicar tu alojamiento. Hay muchas opciones.
3. Confianza al reservar: Airbnb está diseñado para recompensar la confianza, que suele una de las mayores preocupaciones al alquilar una alojamiento privado. Además, a la hora de pagar, Airbnb es el intermediario y eso te ahorra cualquier malentendido entre huésped y anfitrión. SI surge algún problema, es la plataforma la que responde y media. Los comentarios suelen ser honestos y describirte bien cuál será el ambiente que obtendrás. Y tú eliges en base a ello.
4. Todos son evaluados: Con Airbnb el miedo inicial es mutuo. Tanto el huésped como el anfitrión puede mostrarse recelosos al principio, por eso todos pueden ser evaluados. Así que procura comportarte de forma agradable y espontánea. Sentirse incomodidad, o causar problemas harán que menos gente quiera tener contacto contigo en algún viaje.
Por eso todos tienen que abrir cuenta para poder ver la calificación recibida, que es un requisito indispensable al terminar el viaje. Si alguna de las dos partes no escribe su reseña de la experiencia, ninguna de las dos reseñas es publicada. Y en esas reseñas encontrarás que la calidad de las personas puede ser maravillosa, por ejemplo, un anfitrión uruguayo ayudó a salvar la vida de su huésped, el escritor Hernán Casciari que sufrió un infarto.
5. Pagas por lo que necesitas: Los mochileros suelen pasarla muy bien con este sistema, porque los servicios suelen abarcar lo básico: techo para dormir y algo de comida. No habrá personal de limpieza, quizá no haya cajas fuertes, ni bar, ni más servicios que suelen encarecer el precio de un hotel. La plataforma nos permite elegir los servicios que deseamos tener y prescindir de ciertos lujos. Y eso nos puede permitir hacer viajes más largos.
6. No siempre tienes que comer fuera: Muchos de estos alojamientos te permitirán comer comida casera local, según lo que indique el contrato pactado. Y si rentas todo el departamento, puedes cocinarte tú mismo.
7. Es muy rápido pactar: Por lo general cuando se contacta al anfitrión es porque ya se tiene decidido a realizar la reserva y a su vez el anfitrión está dispuesto a aceptar inquilinos temporales, así que es cuestión de una llamada y tener las fechas listas.
8. Hay un seguro de protección para el anfitrión: Si estás dando tu casa para los viajeros, esperas que además de la paga haya ciertas garantías en caso que la relación huésped/dueño de casa no funcione. Revisa este link.
https://youtu.be/t7CmW1ohwu0
Contras
1. No se puede dejar equipaje a la salida: Así es, una vez que se acaba el check-out es probable que no haya quien te pueda cuidar las maletas si quieres dar otra vuelta por el lugar. Usualmente los hoteles te ayudan mejor en estos casos.
2. Nadie arreglará tu cuarto: A menos que lo hayan convenido, no esperes que tus anfitriones anden arreglando tu desorden o lavando tu ropa sucia. Por eso es de bajo costo, no incluye muchos servicios de habitación.
3. La intimidad y privacidad no es completa: En un hotel por lo general tú puedes salir a tu gusto, no tienes que saludar a la gente que te rodea, ni tratar de mostrarte simpático. Mientras que en los alojamientos de Airbnb querrás dejar una muy buena impresión y es probable que compartas la casa con más gente y te toque adaptarte. Además podría ser que haya algún horario de entrada o que dependas de que tu anfitrión tenga las llaves del lugar. Tienes que fijarte bien en lo que te ofrecen.
4. No sigue estándares de calidad como un hotel: Los lugares no pasan por una inspección previa. Los comentarios son la mejor referencia. Cualquiera puede dar de alta su vivienda y hospedar turistas. Airbnb se basa en confianza y compromiso de compartir lo mejor de uno con el anfitrión o el huésped.
5. Te pueden cancelar: AirBnB ofrece a los anfitriones la posibilidad de seleccionar distintas políticas de cancelación. Revísalo bien, cuidado te sorprenden. Mira en este link algunas de las políticas de cancelación.
Airbnb tienes sus pros y contras, lo que es innegable es que millones de personas en el mundo están dispuestas a confiar en este sistema que fomenta la calidez, cercanía y ahorro. Y su cocreador Joe Gebbia lo tiene muy claro.