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Special Correspondents es la película escrita y dirigida por el comediante británico Ricky Gervais, lanzada en Netflix el pasado 29 de abril. Con la trayectoria de Gervais esperas un humor absurdo, con una pizca de negrura y muchas risas; sin embargo: Ricky, no me siento satisfecha.
Me contaron de la peli con un tono de indignación: «Es la película más estúpida del mundo y de paso habla mierdas de Ecuador». Como ecuatoriana me sentí indignada también, pero preferí no dejarme llevar por este juicio de valor y sacar mis propias conclusiones.
La trama de Special Correspondents se desarrolla cuando al reportero de radio, Frank Bonaville (Eric Bana) y su técnico de audio, Ian Finch (Ricky Gervais) de la emisora local de Nueva York, GQ 365, les es asignada una tarea que los podría catapultar al éxito: cubrir una guerra civil que se está llevando en Ecuador. Pero la cagan. No logran irse a Ecuador y para evitar el fracaso, hacen falsos reportajes desde la ciudad. La historia se va desarrollando de forma absurda, como solo podría suceder en las comedias gringas.
Lo bueno:
La comedia, si es bien hecha, es una poderosa herramienta para criticar aspectos de la vida y la sociedad de los que nadie quiere hablar. El humor suaviza las duras críticas con risas y así nadie se resiente (a menos que seas un sufridor). Existen unos cuantos asuntos importantes que se topan en Special Correspondents, como la manipulación de la información, la búsqueda de la primicia y cómo aprovecharse de la bondad de la gente en situaciones de crisis. Estos solo se acarician en el guión, pero no son desarrollados por completo.
En el trasfondo hay una crítica del uso de los medios de comunicación y la comunicación masiva en general, que comienza por la falta de ética de Frank, en su búsqueda de la primicia. Esto deriva a una manipulación de la información de forma brutal, tan brutal que es absurda. Sin embargo, en estos tiempos donde cualquier app te permite editar fotos y videos desde un smartphone, manipular la información es algo tan fácil que no es necesario ser un periodista.
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De esta manipulación se genera una crisis y uno de los personajes, la esposa de Ian, se aprovecha de la misma para ganar dinero y fama. Y es que en tiempos de crisis salen a la luz los mejores corazones, pero también los peores. Si existen grandes corporaciones que se benefician de la guerra, ¿por qué no iniciativas que se aprovechen de la bondad de los ciudadanos?
Lo malo:
Hay tantas referencias erróneas de Ecuador en Special Correspondents que comienzo a pensar que son a propósito. Sin embargo, no me da pereza corregir algunas, porque sé que muchas personas podrían tomarlas como reales y bueno… No queremos darle mala fama a mi país, ¿verdad?
A muchos les enojó el hecho de que indiquen que en Ecuador se estaba llevando una guerra civil. Esto, a mí en lo particular no me molesta; porque dentro de la ficción -y hasta en la realidad- esto es posible. Sin embargo hay incongruencias…
NOTA: Puedes interpretar estos puntos como spoilers, así sáltate esta parte si no te gustan.
Todas las mujeres usan poncho: Esta aseveración puede llegar a ser muy ofensiva, en espacial porque en Ecuador el traje típico depende mucho de la región, y bueno existen cuatro: Costa, Andes, Amazonía e Insular.
Selva en Quito: Dentro de los falsos reportajes no podía faltar el sonido ambiental y Frank reportaba desde Quito con sonidos selváticos de fondo. Si se les hubiera ocurrido abrir Google Maps seguro se hubieran dado cuenta que la capital de Ecuador está en los Andes y que tiene un clima frío.
Tormenta de arena: Frank, en su afán de llevar una crónica falsa al extremo, indicó que aparte de las personas matándose en las calles, lo más preocupante era la tormenta de arena en la ciudad de Quito. Sí, hay zonas áridas en Ecuador, pero no desiertos, amigo Frank.
El equipo de fútbol equivocado: Los cómplices de Frank e Ian «ayudan» gritando frases en español, pero no le atinan al equipo de fútbol. Si querían ser más acertados, debieron gritar «Barcelona», «Emelec», o si querían ponerse súper locales «Deportivo Quito» o «Liga Universitaria».
Llamas en la selva: ¿En serio? Llamas es a frío, como selva es a calor.
Chili de desayuno: En Ecuador la comida picante no es una particularidad, pero sí la comida con chancho o con plátanos. Un bolón de verde con chicharrón hubiera sido más acertado.
Existen otros desaciertos, que enserio aún me queda la duda si han sido puestos a propósito o qué.
Lo feo:
Es realmente una mala la película. Pudo haber tenido mejores diálogos, actuaciones y especialmente locaciones. Aun siendo una producción de bajo presupuesto, pudo haber sido mejor. La trama es interesante, pero se desenvuelve de manera flojita y llega a ser hasta predecible. Lo siento Ricky Gervais, debiste quedarte con The Office.