El ser humano es una máquina para romper límites, está en su naturaleza. Una muestra de esto es el fabuloso reto que presenta el ilustrador alemán Clemens Habicht con su más reciente creación lúdica: el Rompecabezas de 1000 colores, producido por la empresa Lamington Drive Editions.

Ese quebradero mental es básicamente un cuadro de gradientes de colores CMYK  de un millar de piezas, cada una con una variación de la gama.

No sabemos si será el mayor placer de un diseñador gráfico o su peor obsesiva pesadilla, pero visualmente es hermoso. Ya hay una segunda edición del rompecabeza y se está preparando la tercera. Puede adquirirlo aquí.

Vale destacar que el ojo humano percibe milones de colores -no hay un canon científico que defina la cifra exacta- y podría decirse que todo reside en cómo la mente de cada persona combina la luz que ingresa por su ojo. Según la teoría ocular del británico Thomas Young (1773-1829), los conos -células sensibles- de la retina identifica cerca de cien graduaciones distintas del azul, verde y rojo. En base a esas cifras y la mezcla recibida es que se llega a identificar los millones de colores.

Si quieres conocer más sobre Clemens Habicht, aquí te ponemos algunas fotos de otras de sus creaciones.

Así, ¿quién no quiere romperse la cabeza?