“No permita que me mate a mí también”, frase que Kenji Goto señala en un video que provoca horror. Él se dirige al primer ministro de su país, Shinzo Abe, y se le ve con la foto de su compañero japonés, Haruma Yukawa,  que habría sido decapitado.

Durante días se buscó comprobar que la amenaza de muerte había sido ejecutada, luego de que cumplió el plazo de 72 horas que se señaló inicialmente de entregar  200 millones. Las autoridades japoneses indican que el video producido por los yihadistas de ISIS es real.

#BREAKING: ISIS RELEASED NEW VIDEO saying Haruna Yukawa has been beheaded, making Goto speak on behalf of #ISIS. pic.twitter.com/0B6YrFq6YV

— Bulletproof Keyboard (@_DarkPeace_) enero 24, 2015

“No tengo palabras para imaginar el dolor de su familia. Se trata de un acto de terrorismo inexcusable y una barbaridad imperdonable. Estoy indignado y lo condeno enérgicamente”, señaló Abe.

En el vídeo, Yukawa también señala que ISIS ahora cambia las condiciones de su rescate: si liberan a miliciana Sajida al Rishawi, detenida en 2005 antes de atentar en hotel en Jordania, Goto podría ser liberado.

Esto pone a Japón en una posición precaria, pues después de la 2da Guerra Mundial, el país nipón juró nunca volver a ser partícipe de ninguna guerra, y así eliminó a la institución militar. Ahora hay muchas personas que piden al gobierno retomar las armas, pero aún hay gente que busca la paz.