¿Qué sentirían si han sido expuestos al plomo día tras día? Pues es lo que sucedió en India cuando inspectores de alimentos del país ordenaron a la empresa de Nestlé recuperar un lote de fideos fabricados por ellos, que contenía peligrosos niveles de plomo.

Mientras realizaban pruebas de rutina, dos funcionarios de la FDA (The Food Safety and Drug Administration) dijeron que todos los fideos probados en ese momento en el laboratorio estatal estaban contaminados. Tenían una concentración de plomo casi siete veces mayor al límite permisible. Según la FDA el límite aceptable de plomo oscila entre 0,01 ppm (partes por millón) y 2,5 ppm. Los fideos contenían 17.2 ppm.

¿Tienen idea de lo peligroso que puede ser esto?

Según la Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades, el plomo afecta principalmente al sistema nervioso, tanto en niños como en adultos.

Estar expuestos al plomo puede producir anemia, debilidad en los dedos, las muñecas o los tobillos. En mujeres embarazadas, los niveles de exposición altos pueden producir abortos. En hombres, una gran exposición de este elemento puede alterar la producción de espermatozoides. Y en el caso de los niños, dependiendo de la cantidad que ingieran, pueden llegar a desarrollar anemia, daño al riñón, severo cólico de estómago, debilidad muscular y hasta daño cerebral.

En el 2014 la ONU manifestó su preocupación por la presencia de plomo en la comida infantil y de arsénico en el arroz. Esta comisión estableció un límite de 0,01 miligramos de plomo por kilogramo en los potes de comida de los bebés. Antes se permitía el doble, hasta 0,02 miligramos por kilo.

El plomo se encuentra en el medio ambiente y la comida lo absorbe a través de este. Debido ello la Organización de las Naciones Unidas ha sugerido a los fabricantes que escojan su materia prima de zonas libres plomo. La mayoría de los niveles altos que se encuentran en el ambiente se originan de actividades humanas.

Las principales fuentes del plomo son: el aire, la tierra, el polvo (dentro y fuera de la casa), los alimentos (que pueden estar contaminados del plomo en el aire o en los envases) y el agua (debido a la corrosión en las tuberías).

No se ha demostrado definitivamente que el plomo produce cáncer en seres humanos pero el Departamento de Salud y Servicios Humanos (DHHS) ha determinado que es razonable predecir que el plomo y los compuestos de plomo son carcinogénicos, basado en evidencia limitada en estudios de seres humanos y en evidencia suficiente en estudios en animales.

Existen reglamentos y recomendaciones para proteger la salud pública y que las personas sean cada vez menos expuestas a este metal, sin embargo se deberán tomar medidas más estrictas para que esos estándares se cumplan.

Nosotros podemos reducir las exposiciones al plomo, estando atentos a las fuentes de este elemento para evitarlas:

• Si compras una casa construida antes del año 1978, asegúrate de verificar si la pintura contiene plomo y de ser así contrata a un profesional que retire la misma. Lijar las superficies pintadas con plomo puede causar envenenamiento.

• Tanto la tierra como el polvo pueden contener plomo. Si vives cerca de casas antiguas, carreteras, o plantas industriales enséñenle a sus hijos a no masticar o tocar estas superficies y asegúrate de que laven sus manos a menudo, especialmente antes de comer.

• Cambia las tuberías antiguas de tu casa. Antes, la plomería contenía altos niveles de plomo, posteriormente fueron remplazadas por cañerías de cobre.

• La Environmental Protection Agency (EPA) dice que si un grifo no se ha usado durante 6 horas o más, usted debe dejar correr el agua hasta que el agua esté fría.

• En la superficie de las plantas comestibles puede depositarse plomo o puede estar incorporado al suelo por las raíces. Por lo tanto debemos tener cuidado si realizamos cultivos domésticos. Lavemos bien las hortalizas antes de consumirlas para remover los depósitos de la superficie.

• La reparación del radiador (del auto) puede también aumentar la cantidad de plomo en el hogar.

• Revisen las etiquetas de los tintes, los cuales pueden contener plomo.

• Procuren que sus niños tengan una nutrición adecuada, suministren vitaminas y minerales, especialmente calcio y hierro.