El cine en África debe ser uno de los más desconocidos o menos atendidos; de seguro pensamos que los problemas sociales y políticos que tienen, no les da tiempo de pensar o hacer arte -a pesar de saber que muchas civilizaciones a través de la historia de la humanidad lo hicieron pese a sus circunstancias-. Y si quizás lo pensamos, estamos seguros que el arte africano debe ser único en su especie. Obviamente no puede ser el mismo al que estamos acostumbrados con Hollywood, sin desmerecerlo.

Entonces, si piensas que puede interesarte el cine africano, de seguro aún más querrás conocer a sus mujeres cineastas. Su obra regularmente está mezclada con su vida, no es de extrañarse debido a la constante represión que viven.

Directoras de cine africanas

Las mujeres dentro del cine en África NO tienen una larga historia, en realidad todo empieza hace menos de 50 años. Esto cuando en 1972 aparece en escena quien sería la primera realizadora africana, Safi Faye, con su filme La Passante. Tuvo un total de 12 producciones fílmicas antes de terminar su carrera en 1996, actualmente reside en Paris. En realidad, su filmografía es más conocida en Europa que es su nativa tierra, Senegal, a la censura.

Después de Safi aparece otro mujer que llevaría al cine africano a festivales internacionales, Nadia El Fani, presenta un cortometraje documental Pour le plaisir en 1990. Ella, de madre francesa y padre tunecino, se presentó en el séptimo arte con una actitud rebelde y transgresora. Su discurso fílmico siempre está relacionado con la libertad de expresión y religión, además de la propiedad y autonomía de su cuerpo, siendo así el género documental su predilecto.

A pesar de las reprimendas, ella no se detuvo; incluso a pesar de la terrible acción en 2011 cuando presentó Laïcité Inch’allah! y unas personas destruyeron el cine, en Túnez, en donde se proyectaba su documental. En su filmografía tiene un total de diez producciones, siendo en 2010 la última, Même pas mal.

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Pocas Pascoal realiza su primer cortometraje documental en 1995, Memoire d’enfance, y con tan solo cuatro producciones ya puede dar cuenta del machismo al que se enfrenta cada vez que realiza una película. A diferencia de El Fani, Pascoal no solo ha hecho documental, sino que también se interesa ficción; por supuesto con un mensaje relacionado a las políticas de su país de origen, Luanda. Por aquí tudo bem (2011) es un genial ejemplo y una buena película por la cual empezar.

«Hay muchas formas de ser directora en África, pero serlo significa convertirte en una luchadora, una persona con la mentalidad abierta que no tiene miedo a hablar de cualquier tema. Necesitas ser fuerte para estar peleando todo el rato por cosas por las que un director nunca lucha», ha dicho Pocas Pascoal.

Este año se estrenó The Revolution Won’t be Televised de la africana Rama Thiaw (portada), que fue presentado en el Berlin International Film Festival. Ella ha sido directora y guionista. Cuenta con solo dos películas, pero sus producciones tienen una fuerza impactante que la ha llevado a ser rápidamente conocida.

«En Senegal seguimos viviendo bajo el colonialismo, también en la cultura; así que tenemos que deconstruir la imagen de las mujeres negras africanas, no solo para la gente de fuera, sino para nosotros mismos también. Por eso es importante que creemos nuestras propias imágenes», asegura Thiaw.

Moufida Tlatli fue la primera cineasta árabe en dirigir un largometraje en el mundo musulmán, esto en 1994 con Los silencios del pasado. Este filme fue alabado por la crítica, llevándose numerosos premios: Cámara del Festival de Cannes de Oro, el Tanit de Oro de Cartago, British Trofeo Sutherland Film Institute Awards, Crítica Internacional del Festival de Cine de Toronto y Golden Tulip del Festival de Estambul Internacional de Cine.

¿Te interesa conocer más directoras de cine africanas?

Puedes tener en cuenta los siguientes nombres: Angéle Diabang (Senegal), Anne Laure Folly (Togo) y Fanta Regina Nacro (Burkina Faso).