Compartir
Tu cartera de cuero es tu mimada y solo la usas en ocasiones es especiales por miedo a que se dañe. ¡Pero dentro de tu clóset no se lucirá! Para que la disfrutes más debes saber cómo cuidar tus carteras de cuero y sacarlas a pasear.
Lo primero que debes saber es que el cuero es piel, así que se puede llegar a estirar, raspar o manchar, por lo que es sensible a ciertas sustancias u objetos. Por ello, hay que tener en cuenta los siguientes cuidados.
« Si eres amante de las carteras, estas son las tendencias del 2016 que debes seguir »
1. No botes el relleno
El primer error que cometemos al comprar una cartera de cuero es botar los papeles con los que las rellenan. Estos sirven para mantener la forma de tu accesorio, por lo que es recomendable que siempre los guardes para que conserven su estructura.
2. Tenla en un bolso aparte
Se aconseja guardar las prendas en bolsas de algodón y abiertas para permitir la ventilación. Además este material evita la condensación de la humedad que puede perjudicar la buena conservación de tu cartera de cuero.
3. No cargues mucho peso
Aparte de que te causará molestias en la columna y hombro, cargar mucho peso en tu cartera de cuero la maltratará. Con excesivo peso, las tiras se estirarán demasiado y pueden deformarse.
4. Protégela del agua
Lo primero que debes hacer es protegerla de la lluvia. Antes de comenzar a usar tu cartera debes frotarla con alguna cera para cuero y seguir las instrucciones del producto. Las ceras hidratan el cuero y dejan una capa protectora que lo impermeabiliza.
Además, no guardes prendas húmedas dentro de las carteras o de los bolsos, ya que si estas destiñen, mancharán el interior y será muy difícil sacar las manchas.
5. Evita raspones
Ten cuidado al guardar prendas con apliques de lentejuelas, tachas u otros objetos puntiagudos como agujas o alicates, ya que pueden raspar al cuero y si eso ocurriera, no habría solución.
6. Que no tenga contacto con…
Tintas, perfumes, maquillajes, alcohol, aceites, selladores, impermeabilizantes y solventes que provocan el deterioro del material de forma irrecuperable.
Nunca utilices jabón de glicerina, limpiadores abrasivos, barniz, detergente u otros productos de limpieza, alcoholes o agua de amoniaco.
Por último, evita tomar tu cartera de cuero con las manos pegajosas o con restos de grasa.
« Lee también de estas 12 tendencias de moda del 2015 que queremos que mueran »
Cómo lavar una cartera de cuero:
Si tu cartera se ha ensuciado y es algo que podrías resolver en casa antes de mandarlo a lavar con un especialista, lee lo siguiente.
Vas a necesitar: trapos de microfibra o toallas un tanto desgastadas, shampoo para bebé o jabón suave y agua de filtro. No uses agua de caño porque podría contener cloro y afectar el cuero.
Gentilmente pasa el trapo con shampoo por la superficie y con otro trapo ligeramente humedecido con el agua, retira completamente los rastros de suciedad y shampoo. Seca la cartera completamente con un trapo extra. Si aún está humedecido, déjalo secar al ambiente, no al sol porque podría resecar y dañar el cuero. Tampoco se debe secar el material con secadora, ya que el calor puede dañar el material.
En el caso de derrames, secar el liquido inmediatamente con un paño limpio o una esponja absorbente seca. ¡No frotes! Luego seca con una toalla limpia y al ambiente.
Limpia tus carteras cada dos o tres meses, según sea necesario. Nunca la laves a máquina ni guardes tu accesorio en lugares húmedos.