No me logro imaginar siete mil millones de personas en el mundo, pero puedo aproximarme: imagina el estadio Camp Nou del famoso Barcelona de España lleno (son 99.354 personas). Bueno, necesitarás 70.455 estadios de semejantes dimensiones para abarcar a todo el mundo. Sigue estando difícil de hacer ese espacio en la mente. Pero no creas que eres el único, para eso están los videos de Cyriak. Él es un muchacho inglés lleno de inquietudes, que también se sorprendió de saber que éramos tantos en la Tierra, y que estamos reproduciéndonos como conejos.

Pues él agarró su computadora y puso a funcionar la máquina ‘creepydélica’ de reproducir conejos en video, hasta llegar a los 7 billones (así llaman los angloparlantes a la cifra de 7 mil millones). Al poco tiempo de estar trabajando en la animación, se dio cuenta de que por mucho que sacara conejos de cada poro de la piel de los conejitos animados, no terminaría. Entonces reparó que para ese entonces ya había 400 millones de personas nuevas en la Tierra.

Miro el video, un conejito salta en la pradera. Tudo bem. Hace piruetas, salta sobre un hongo, cuando de pronto, empieza a acelerarse al ritmo de la música y en un tropezón, mientras caminaba con sus orejas, sale de su cuerpo otra mitad, se sorprende, da un giro que despide cinco, diez, veinte, cuarenta conejos, de cada uno. Basta, tienes que mirarlo:

Un conejo monta sobre otro, entonces como gremlins remojados, brota otro conejo, y alrededor ya son miles que suman un conejo gigantesco, que tiene harto swing por cierto; y ese movimiento es suficiente para que a su alrededor más conejos gigantes se acumulen y hasta el fin de los tiempos. Corre, Conejo, Corre. Aquí solo han pasado 2 minutos con 22 segundos, pero ya estoy alucinado y con ganas de hacer un bailecito para entrar a cualquier espejo y reproducirme aunque sea en dos, ante mis ojos… y caer en cuenta de la realidad.

Así es, somos solo la unidad (una unidad de 7 mil millones de personas), y el cosmos lo sabe.

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Por cierto, la música del video del los conejos, también la compuso Cyriak, hace ya un par de años y estaba allí la melodía esperando pacientemente una idea visual que la acompañe. Se fue junto a los conejos y está destinada a ser reproducida una y otra vez, porque es muy pegajosa.

Bienvenidos al mundo de Cyriak

Aquellos viejos tiempos: 2004. Bueno, es que recién empezaba Facebook y Youtube era una idea que alguien estaba programando, así que son viejos tiempos, señores. En esa precariedad ‘cavernaria’, este muchacho inglés gustaba de colaborar con gifs a la página inglesa B3ta, sin imaginar -o quizá sí, el profeta- que las animaciones cortas (pop, surrealísticas y algo perturbadoras) basadas en antigua geometría fractal, softwares potentes y acciones repetitivas, serían la gasolina que necesitaba esta década para separarse del siglo anterior.

Pausa: Por si te preguntabas por qué andamos hechos los interesantes hablando de geometría fractal -y a lo mejor pienses que no sabemos-, pues te lo decimos rapidito: son estructuras básicas, fragmentadas o irregulares que se repiten a diferentes escalas (algo muy común en la geometría de la naturaleza que nos rodea o en la teoría del caos, por cierto). Pero en diseño y animaciones, los conejitos del video son un buen ejemplo. El siguiente video también:

Entonces resultó que las cosas que enviaba Cyriak a esa página lo hizo uno de los favoritos de la afición. Es así que en 2006 la BBC le financió la producción de un corto animado bastante grotesco; tanto, que allí reside la gracia y su repulsión termina rápido, para dar paso al juego de verlo. Es como cuando de niño jugabas con los mocos o la tierra de los brazos; si te lo pones a pensar es asqueroso, pero quizá entonces imaginabas que eras un muñeco de fango que se arranca cosas de sí mismo como si nada. Sigue siendo una costumbre popular entre los pequeños (y también de grandes en algunos  ).

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Entonces viste a los monstruos que parecen tu propio cerebro escaparse de ti y vas al siguiente video. Vale decirlo, usualmente todos los personajes de los videos de Cyriak están sonriendo o bailando, y ese es un factor potente para agarrarles afecto.

Moraleja niños y grandes: Si sonríes y bailas, tienes las de ganar; así seas horripilante.

https://youtu.be/-3JCESdFNyw

Ahora pongamos una canción de Frankie Valli y Four Season y dejémonos de muñequitos. Advertencia: No nos salvaremos de los brotes y las repeticiones.

En este momento ya te cansaste de ver videos de Cyriak. La mala/buena noticia es que estás rodeado de videos de Cyriak de la vida real, donde siete mil millones de personas como tú, con células y huesos muy similares a ti, están comiendo, respirando, amando, odiando, diciendo, bebiendo, comiendo otra vez. Mejor disfrútalos, porque sabes que les volverás a hacer clic.

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