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9. ¿Tienes alguna disciplina en el momento de escribir? ¿Algún horario?
La terquedad (algunos la llaman constancia), el perfeccionismo (otros lo llaman rigor) y el saberse divertir son la mejor disciplina. Antes escribía solo por las noches, ahora me hecho más diurno.
10. Cuando escribes ¿esperas la ‘inspiración’ para hacerlo o ésta te encuentra escribiendo?
Salvo que seas Paris Hilton y tengas la vida resuelta, nada llega sin esfuerzo.
11. ¿Por qué en tu libro “Conejo ciego en Surinam” (Mondadori, 2013) los personajes humanos son espiados por el conejo cuando estos estás teniendo relaciones sexuales?
Cuando se describe ese momento en la novela, él lo narra como la voz de un documental de NatGeo o Discovery Channel ya que nuestra especie le resulta por demás animalesca y tan distinta (inferior) a él. El conejo se cree superior a la raza humana. Sin embargo, como buen ser pensante, sucumbe ante el voyeurismo.
12. ¿Considerarías a “” literatura erótica?
Nunca lo pensé como algo así. Ni en la parte de la relación sexual entre M. y la chica que llega inesperadamente a su departamento. Peor aún entre la relación entre M. y su vecina B. Aunque tenga sus momentos kinky, no estoy seguro de que la novela per se sea una exaltación al eros.
13. La última vez que hablamos tenías dos novelas por terminar y estabas metido en tu segundo libro de cuentos. ¿Tienes algún libro próximo a publicarse o estás trabajando en algún proyecto literario del que puedas adelantarnos algo?
El segundo libro de cuentos lleva mucho tiempo esperando por varios motivos, por un lado indecisión mía debido el título y por cuentos que fui incluyendo y luego desechando. También porque no ha sido fácil hallar editor (publicar cuento es más difícil que novela). Cuentos ya antologados en varias ocasiones tanto en Ecuador como fuera de él (“La puta madre patria” y “Aventuras de un grupo de becarios en una universidad norteamericana”) originalmente fueron pensados para integrar este cuentario.
Sobre las dos novelas, de las que tengo boceteadas unas cincuenta-setenta páginas, terminaré este año una de ellas. Serán más extensas que el conejo, y acaso más ambiciosas. La que está más próxima tratará sobre el mesianismo. Pero hay que ir tranquilo. Volver a alimentarse de los grandes como Augusto Monterroso, Kurt Vonnegut o César Aira y leer más a Witold Gombrowicz, Gordon Lish o Mario Levrero. Es lo que puedo adelantar…
14. Nos enteramos que tienes un taller de escritura creativa que comienza el 23 de este mes. ¿Qué podemos esperar de este taller?
El nombre del taller es Combustión Espontánea, y por ahí hay una idea. La espontaneidad, lo genuino son las puertas que te llevan a encontrar tu propia voz. Sin embargo nada de eso es posible sin leer (leeremos y analizaremos varios cuentos) ni escribir (trabajaremos semanalmente los escritos de los participantes). El taller se centrará en el cuento.
15.¿Qué nos puedes decir de Paperback? ¿Cómo surgió el proyecto?
Por iniciativa de Carlos Terán Vargas y mía. Ambos nos conocimos en la época de los inicios del grupo cultural Buseta de papel. Él había estudiado guión en Cuba y tenía este doble interés tanto en cine como en literatura. Mi background profesional durante muchos años fue la publicidad, sin dejar lo literario, claro está. Luego pasé a la gestión cultural. Similar experiencia tuvo también Carlos. Entonces pensamos en crear un estudio de contenidos. El nombre Paperback surgió en honor a «Paperback Writer», la canción de los Beatles que es una suerte de homenaje a los escritores y a las publicaciones tipo “Paperback”, que hasta el día de hoy masifican el consumo de literatura en los mercados estadounidenses e ingleses.
16.¿Cuál es el target de la agencia y qué objetivos tiene?
Crear y adaptar contenidos para series de televisión, unitarios, miniseries, documentales, cortos y largometrajes, como objetivo principal. Nos dimos cuenta que pese a existir muy buenas productoras, nuestro medio carece de una empresa que se la juegue por la creación de contenidos.
También nos interesa incursionar en el “advertainment” (publicidad más entretenimiento) o “storytelling” (como también se está conociendo ahora), y brindar servicios de coaching creativo a instituciones.