La tecnología, vivimos diciéndolo, ocupa un lugar preponderante en las relaciones entre las personas en este siglo. Enfocar solo el lado negativo, respecto a que la tecnología aísla y hace vivir en una burbuja a sus usuarios (jóvenes especialmente) es injusto, porque también tiene un poder integrador. Y no solo entre los jóvenes sino de todas las generaciones, de allí que últimamente vemos con más frecuencia abuelos 2.0.

Se les puede llamar así (abuelos 2.0) porque son personas que bordean la tercera edad, y que están involucrados emocional o funcionalmente con sus dispositivos electrónicos, pues estos les permiten integrarse más a sus familias de formas virtuales, que también pueden llegar a ser cálidas, efectiva y físicas. Es una tendencia real, que seguramente has vivido en tu familia o en la de amigos.

Si bien al principio enseñar tecnologías nuevas a los adultos mayores podía ser algo frustrante para los nativos digitales o milenials, porque sus abuelos o padres mayores no nacieron con esa tecnología. No es una falla, es algo generacional, que en su momento también sucederá con los jóvenes de hoy al usar tecnologías del futuro.

Por fortuna, para las necesidades actuales surgió la tablet y pareciera haber dado justo en el punto, pues su tamaño más grande fue el ideal para acostumbrar a los adultos mayores a ir de una aplicación a otra, que puedan leer con claridad los mensajes, y el hecho de tener que usar sus manos en lugar de un teclado o un ratón, fue para muchos la clave, porque aparte es una herramienta muy intuitiva y de buena portabilidad por su bajo peso.

Luego vendría el detalle de los asistentes virtuales, lo cual facilita muchas tareas que algunos nietos no quieren hacer. Por ejemplo, en lugar de leer una noticia, pueden pedirle al sistema de su dispositivo que la transforme en audio y escucharla. O cosas como preguntar el clima, saber qué está pasando. Un Siri, Alexa o como se llamen los asistentes virtuales de turno, han sido muy bien acogidos por muchos abuelos 2.0 por su infinita paciencia (y responder mucho mejor que sus nietos o hijos).

De allí que no debería sorprendernos lo fácil que los abuelos 2.0 pueden adaptarse al mundo digital, aun si no han usado antes algún gadget o jugado un videojuego actual.

Respecto a las redes sociales, si en whatsapp tienes algún grupo familiar o te escribe tu mamá, tías, abuelos y etc. Sabes bien que les encanta enviar mensajes de voz (a veces sin audio, otros en cambio larguísimos), y que no desaprovecharán este medio para enviarte videos bonitos, bendiciones, piolines y memes inocentes.

Pero ojo, que los abuelos 2.0 una vez que van descubriendo aplicaciones, no tienen reparo en dedicarse a ella, como podemos ver en este video de Antena 3, donde aparece Melquiades, un anciano español de 91 años, quien se hizo viral por un video donde enseña a componer reguetón.

No hay ningún motivo para dejar a los adultos mayores fuera del mundo digital, porque ellos algún día fueron pioneros o usuarios en muchos de los grandes avances de la ciencia y tecnología de punta de sus tiempos. Es además una bonita oportunidad para concertar un encuentro y volver a abrazarlos.

¿Cuántos abuelos 2.0 conoces? Compártenos tus experiencias en el tema

«Lee también Tus abuelos y padres vivirán más si los visitas con frecuencia»